What is Value in Health Care? (2010)
What is Value in Health Care?
Michael E. Porter, Ph. D
New Eng J Med363:26, December 23, 2010, 2477-2481
Michael Porter, probablemente el más famoso y reconocido experto en estrategia del mundo, explora en este artículo lo que es valor en sanidad.
Parte de la base de que en sanidad hay gran cantidad de stakehholders, a veces con objetivos en conflicto, que incluyen acceso a los servicios, rentabilidad, alta calidad, contención de costes, seguridad, satisfacción, etc.
Alcanzar el máximo valor para el paciente debe ser el gran objetivo de cualquier organización de servicios sanitarios, definiendo el valor como los resultados obtenidos por dólar gastado.
Algunos conceptos relevantes que introduce Michael Porter en su artículo:
- Si el valor mejora, los pacientes, pagadores, proveedores y suministradores pueden en conjunto beneficiarse, al tiempo que la sostenibilidad económica del sistema de salud se acrecienta.
- El valor debe ser siempre medido en torno al cliente y ese valor debería determinar la recompensa para todos los otros actores del sistema.
- El valor en sanidad debe medirse por los resultados obtenidos, no por el volumen de servicios ofrecidos, y cambiar el foco desde el volumen al valor es el gran reto.
- Tampoco el valor se mide por los procesos, la mejora y medición de procesos es una importante táctica, pero no puede sustituir a la medición de los resultados y los costes.
- Dado que el valor se mide como resultados en relación con costes, incorpora el concepto de eficiencia.
- La reducción de costes sin tener en cuenta los resultados es peligrosa, llevando a falsos “ahorros” y potencialmente limitando la atención efectiva.
- Para cada condición médica, no hay un único resultado que capture por sí mismo los resultados de la atención.
- Para reducir el coste, la mejor aproximación es con frecuencia gastar más en algunos servicios para reducir la necesidad de otros.
- La prestación de servicios sanitarios incluye varias unidades organizativas, desde hospitales a atención primaria u otros centros. La correcta unidad de medida debe agrupar todos los servicios o actividades que conjuntamente determinan el éxito en el logro de un conjunto de necesidades del paciente.
- Estas necesidades vienen determinadas por la condición médica del paciente.
- La definición de una condición médica incluye las asociaciones más comunes, lo que significa que el tratamiento de la diabetes, por ejemplo, incluye el de condiciones tales como hipertensión, insuficiencia renal, enfermedad retiniana, así como enfermedad vascular.
- Para atención primaria y preventiva el valor debe ser medido para grupos definidos de pacientes con necesidades similares.
- La transparencia en el valor debe ser compartido entre los proveedores implicados.
- El valor para los pacientes sólo se revela a veces con el tiempo y se manifiesta en resultados a largo plazo, tal como recuperación mantenida.
- Para pacientes con múltiples condiciones médicas, el valor debe ser medido para cada condición.
- La actual estructura organizativa y sistemas de información representan un obstáculo para medir el valor.
- El concepto de calidad ha llegado a ser confuso. Generalmente se relaciona con procesos. De los 78 indicadores del HEDIS (Healthcare Effectiveness Data and Information Set) todos menos 5 son medidores de procesos, y no hay ninguno auténticamente de resultados.
- Medir, comunicar y comparar resultados son, quizá, los pasos más importantes para mejorar resultados y tomar buenas decisiones sobre reducción de los costes.
- Los resultados para cualquier condición médica pueden agruparse en tres tercios:
- 1. Estado de salud mantenido o retenido (supervivencia o grado de salud o recuperación).
- 2. Proceso de recuperación, tiempo para la recuperación.
- 3. Sostenibilidad de la salud. Recurrencias, resultados a largo plazo de la terapia.
- A continuación, Michael Porter pone ejemplos muy demostrativos de cada uno de estos tercios en dos condiciones: Cáncer de mama y Osteoartritis primaria aguda de rodilla con necesidad de prótesis.
Una excelente aportación por parte de Michael Porter, que no es nuevo en sanidad y ya había escrito el libro “Redefining Healthcare” (Harvard Business School Press, 2006).